Y si falla la bomba de insulina, ¿qué hago?
Los niños tratados con bomba de insulina (realmente llamada infusora subcutánea continua de insulina) son una minoría entre los que tienen diabetes mellitus tipo 1. Sin embargo, dada la importancia de este tema, este consejo va dirigido a esta minoría de pacientes y sus familias.
Toda persona portadora de una bomba de insulina debería tener una pauta alternativa de tratamiento para administrar la insulina sin utilizar la bomba, por si ésta dejase de funcionar o sucediese cualquier otro incidente como, por ejemplo, quedarse sin catéteres.
Cuando esto sucede, debemos tener un “plan B”: una pauta que consiste en múltiples dosis de insulina administradas mediante bolígrafos.
¿Cuánta insulina debe administrarse y cómo?
- Los días en que no se pueda utilizar la bomba de insulina, debemos administrar una insulina lenta (una o dos veces al día, según se trate de insulina Lantus® o insulina Levemir®) y varias dosis de insulina rápida con las comidas. Todo ello administrado con bolígrafos.
- Los bolos de insulina que administramos en la comidas serán los mismos, pero administrados con los bolígrafos. Usaremos la misma dosis y la misma insulina que la que usamos con la bomba (insulina Apidra®, insulina Humalog® o insulina Novorapid®).
- La insulina basal que administra la bomba deberá sustituirse por un análogo de insulina lenta (por ejemplo insulina Lantus® o Levemir®). Para ello, debemos sumar todas las unidades del ritmo basal que nos infundiría la bomba durante las horas de desconexión y administrarla en forma de insulina lenta con un bolígrafo. Además, siempre sumamos unas unidades adicionales (entre un 20% y un 25% según la edad) puesto que con el tratamiento con bolígrafos siempre se necesita una dosis mayor de insulina que con el tratamiento con bomba.
El cálculo de esta nueva pauta no es difícil, pero, como todo, es necesario que te lo expliquen una vez para saber utilizarla cuando sea necesario.
Recuerda:
- Toda persona portadora de bomba de insulina debería tener o saber calcular su pauta alternativa en caso de desconexión del dispositivo. ¿Qué pasaría si un sábado por la tarde la bomba deja de funcionar? ¿Qué harías? Es poco probable que suceda, pero cuando pasa es angustiante no saber qué insulina hay que administrarle ni qué dosis.
- Si tu hijo lleva una bomba y no sabes o no recuerdas su “plan B” deberías preguntárselo a su equipo habitual de diabetes.
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