Alimentos no convencionales: qué tenemos que saber antes de incorporarlos a nuestra dieta
Continuamente, se ponen de moda algunos alimentos a los que se les atribuyen propiedades medicinales, incluso curativas, como por ejemplo la quinoa, el mijo, el seitán, la col kale, el tofu, el teff, el skyr, aceite de coco, jarabe de Arce, cúrcuma, semillas de sandía, etc.
Más allá de las motivaciones que nos muevan a incorporar estos alimentos en nuestra dieta (ya sea por las propiedades medicinales que se les atribuyen o simplemente porque son alimentos interesantes para complementar nuestra alimentación tradicional), desde el punto de vista de la diabetes tenemos que poner atención en algunos aspectos que a menudo nos resultan desconocidos.
Tres aspectos que debes saber sobre un alimento nuevo antes de incorporarlo a tu dieta
1. ¿Qué nutrientes principales aporta?
Cuando incorporamos un nuevo alimento a nuestra alimentación, debemos tener en cuenta que a menudo actúa como sustituto de otro alimento. Por tanto, los nutrientes que aportan deberán ser similares. Por ejemplo, si desayunamos leche con galletas, tipo María, y decidimos incorporar la avena, a partir de ese momento desayunaremos leche con avena y dejaremos de tomar galletas, ya que ambos alimentos aportan principalmente hidratos de carbono.
2. ¿Cómo se puede preparar?
A menudo, la clave del éxito en la introducción de un alimento es saber cómo trabajarlo o cocinarlo. Por ejemplo, la leche con avena en copos enteros es muy complicada de comer para muchos niños ya que les resulta dura y difícil de masticar. Para obtener otras presentaciones, podemos recurrir a las recetas propias de las culturas que tradicionalmente han consumido ese producto. En el caso de la avena, en los países en los que tradicionalmente la consumen, se cocina con agua o leche hasta que queda una textura suave, del tipo arroz con leche, que resulta más atractiva para los niños.
3. ¿Cuál es su composición en hidratos de carbono?
Para consumir estos alimentos, no olvidemos tener en cuenta el índice glucémico o velocidad de absorción (rápida o lenta) del producto, así y como la cantidad de hidratos de carbono que tiene para calcular las raciones. Para el cálculo de raciones, podéis consultar la tabla de raciones donde hemos incorporado nuevos alimentos.
La alimentación es otra manera de conocer el mundo. Incorporar nuevos alimentos en nuestro día a día nos permite enriquecer nuestra alimentación y disfrutar de nuevos sabores y texturas.
Comentarios