Nutrición
Cuando aparece la diabetes a menudo nos centramos en el control de la glucosa y olvidamos que todos los niños deben seguir una alimentación saludable para mantener un buen estado de salud general.
La alimentación saludable promueve un buen estado de salud físico y emocional. Hay que trabajar para que la alimentación se adapte al tratamiento, permita tener una vida social activa y un estado emocional saludable.
¿Qué se debe comer?
Las necesidades nutricionales de los niños y adolescentes con o sin diabetes son similares. Por ello, para saber qué se debe comer, podemos basarnos en las recomendaciones generales:
- Alimentos farináceos preferentemente integrales (arroz, pan, pasta, patata...): 4-6 porciones al día.
- Verduras y hortalizas: 2 o más porciones al día.
- Fruta fresca: 3 o más porciones al día.
- Leche y derivados (preferentemente desnatados o semidesnatados): 2-3 porciones al día.
- Carne, huevo, legumbres y pescado: 2 veces al día. Se debe ofrecer entre 2 y 4 veces legumbres a la semana, y entre 3 y 4 carne, pescado y huevo.
- Aceite de oliva: 3-6 porciones al día.
- Frutos secos: 3-7 porciones a la semana.
- Alimentos superfluos o innecesarios desde el punto de vista nutricional (embutido, patatas chips, helado, chocolate...): consumo ocasional y moderado, nunca diario.
- Agua: 4-8 vasos al día.
¿Cómo cocinar los alimentos?
La manera de cocinar los alimentos también es importante para seguir una alimentación saludable. Es preferible:
- Evitar preparaciones con mucha grasa como los fritos y rebozados.
- Utilizar técnicas como el hervido, vapor, salteado, plancha o sartén, papillote, horno, guisos...
- Para dar más sabor utilizar ajo, cebolla, hierbas aromáticas o especias.
Última modificación:
13/05/2022