Medidor continuo de glucosa (CGM/FGM): qué es y qué beneficios tiene

Un medidor continuo de glucosa (también conocido por las siglas CGM/FGM) es un dispositivo que permite monitorizar la glucosa en el líquido intersticial de forma continua mediante un sensor que se lleva insertado en el tejido subcutáneo. Este dispositivo ofrece lecturas de glucosa cada cinco minutos aproximadamente, lo que permite conocer los valores de glucosa en tiempo real durante las 24 horas del día.

El sensor de glucosa contiene compuestos reactivos sensibles a la glucosa, que miden continuamente su presencia en el líquido intersticial. Diversos estudios han comprobado que la difusión de glucosa en sangre y en el líquido intersticial presenta un breve desfase de cinco a diez minutos entre ambos.

La glucosa se difunde libremente desde los capilares (es decir, desde la sangre) al espacio intersticial (situado entre las células). Por eso, medir la glucosa del líquido intersticial es un indicador fiable de las concentraciones de glucosa en el organismo, y permite a las personas con diabetes realizar un seguimiento de sus niveles de glucosa en tiempo real y obtener información sobre la tendencia de la glucosa.

Beneficios de medir la glucosa en el líquido intersticial

Medir los niveles de glucosa en el líquido intersticial ofrece múltiples beneficios:

• Puede ayudar a alcanzar los objetivos glucémicos.
• Puede ayudar a alcanzar un nivel adecuado de hemoglobina glicosilada (HbA1c).
• Ayuda a disminuir las fluctuaciones de la glucosa.
• Ayudar a reducir los episodios de hipoglucemia.  
• Permite reducir el número de controles de glucemia capilar al cabo del día.

Situaciones en las que se recomienda realizar un control de glucemia capilar con medidor

Aunque utilizar un sistema de monitorización continua permite reducir el número de controles de glucemia capilar en la autogestión de la diabetes, hay ocasiones en las que se recomienda utilizar un medidor de glucosa en sangre para comprobar si las lecturas obtenidas con el sensor coinciden con las que se han obtenido con el medidor.

Se recomienda usar un medidor:

• Durante los periodos en que los niveles de glucosa estén cambiando rápidamente.
• Para confirmar un episodio de hipoglucemia o de hipoglucemia inminente notificado por el sensor.
• Si los síntomas que siente la persona no concuerdan con la lectura del sistema de monitorización.
• En hiperglucemia con valores muy elevados, por encima de 200 mg/dl -250 mg/dl, según el tipo de sensor.

Los sistemas de monitorización continua de glucosa aportan mucha información. ¡Aprovéchala!