Los pies son una zona del cuerpo que a menudo olvidamos. En personas con diabetes tipo 1 es importante crear hábitos para cuidar los pies ya desde niños.
Sigue estas recomendaciones para asegurar que los niños, niñas y adolescentes con diabetes tipo 1 conozcan y mantengan una buena salud de los pies a medida que crecen:
- Mantener los pies limpios: lavarlos diariamente con agua tibia (probar la temperatura con las manos, evitar el agua caliente).
- Secarlos muy bien, especialmente entre los dedos.
- Usar crema hidratante si la piel está seca, para evitar grietas (pero no aplicar entre los dedos).
- Cortar las uñas rectas, sin recortar demasiado, ya que eso podría causar que la uña se encarnase. Limar los bordes afilados.
- Evitar usar zapatos apretados.
- Utilizar cordones o velcro para el ajuste.
- Verificar que no haya objetos extraños dentro de los zapatos. Conviene sacudirlos antes de usarlos.
- Usar los zapatos con calcetines.
- Usar calcetines limpios y secos cada día.
- Escoger calcetines de algodón, sin gomas ni elásticos que aprieten.
- Idealmente, el calzado debe tener una punta ancha y una suela suave y acolchada.
- Se recomienda comprar zapatos al final de la tarde (cuando los pies están más hinchados) y también usar los zapatos nuevos durante un tiempo breve todos los días hasta que resulten cómodos.
- Evitar caminar descalzo, ¡ni siquiera en casa! Siempre usar zapatos o pantuflas, para evitar pisar algo que lastime o corte.
- Mantener un buen control glucémico.
En caso de que aparezcan callosidades, uñas encarnadas, verrugas o heridas, consulta a tu médico de referencia y/o al podólogo.
Bibliografía
Fotografia: Pexels
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