Jaume, excursionista desde los dos años

Jaume tiene siete años y se puede decir que aprendió a caminar en la montaña. A los dos años y medio ya subió sin ningún tipo de ayuda a La Mola, una cima de 1.101,9 metros de la Cordillera Prelitoral en Cataluña.

Desde entonces ha alcanzado más de 40 picos de 1.000, 2.000 y hasta de 3.000 metros de altura. Ha ido dos veces el Pico Aneto, techo del Pirineo con 3.404 m. Su hermana y sus padres, apasionados del senderismo y el alpinismo, la acompañan en todas las expediciones.

La diabetes no ha sido nunca un impedimento para que Jaume alcance las cimas y corra montaña abajo, como le gusta hacer para bajarlas. "Cuesta aguantarle el ritmo", explica su madre, María Morera, "el excursionismo le aporta los beneficios de practicar un deporte cuando se tiene esta enfermedad, más los valores que da la montaña".

Jaume sigue una alimentación adecuada antes y durante la actividad física. Aparte de los controles habituales, si es necesario, se hace algún control más. "Siempre salimos con todo lo necesario para controlar la diabetes. Y de comida, llevamos lo que llevaría cualquier otro alpinista: bocadillos, barritas energéticas, frutos secos, batidos y sobrecitos de azúcar. Hasta ahora nunca ha tenido una hipoglucemia en la montaña".

En vacaciones Jaume y su familia salen casi a diario de excursión. El resto del año lo hacen una vez cada quince días. Pero Jaume también realiza otros deportes habitualmente, como el esquí, el patinaje, el fútbol y el tenis. En su entorno todo el mundo sabe que Jaume tiene diabetes, tanto el profesorado de la escuela como los compañeros de clase y otros alumnos del centro.

¿Todos los niños con diabetes pueden hacer excursionismo como Jaume? Larisa Suárez, la pediatra endocrinólogo de Jaume en el Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona, opina que “estos deportes exigen un alto rendimiento físico por lo que es necesaria una planificación previa, así como consultar al equipo de diabetes para prevenir situaciones de riesgo y poder disfrutar de la aventura”. 

¡Mucha suerte, Jaume, en tu próximo ascenso!